jueves, 29 de junio de 2017

LOST IN TRANSLATION: "THE WAY WE WERE", SOBRE DOUSEI JIDAI (1 DE 4)

Artículo de Bill Randall para The Comics Journal nº 295 (2009). Traducido por Frog2000. 

Mientras estaba leyendo el manga romántico Dousei Jidai recordé una canción bastante sentimental. Al principio pensé que era un viejo dueto de Rosemary Clooney, "The Way We Were", aunque me estremecí un poco al recordar que una vez Streisand se atrevió a ensuciarla y puede que me estuviese acordando de esa versión. Peor aún, creo que llegó a insertarla al final de "Thanks for the Memories" de Bob Hope y Shirley Ross. Todas son canciones que abundan en la nostalgia, y al menos la última también ha sido saqueada por Fallout Boy, enganchándola sin remedio a una interminable serie de mashups de anime en youtube. Con el tiempo las cosas suelen completar un círculo, incluso aunque la canción original tan sólo siga viva en mi imaginación.

Supongo que todo habría sido más simple si hubiese escuchado "Dousei Jidai", la balada de 1973 cantada por Reiko Oshida. Habla sobre la difícil situación de una joven pareja, que solo vive para el amor:

Si el amor siempre debe terminar en lágrimas
Eso es porque el hogar de las lágrimas,
naturalmente, es el amor,
La vida del enamorado
Dousei Jidai

Una caja de ritmos y un sintetizador la convierten en "moderna". Pero la melodía chirriante y el puente de la voz en off hacen que sea anticuada a su vez. Ciertamente es muy de su tiempo. Incluso ahora la estoy confundiendo con las tensiones marciales que se escuchan en la sintonía de Star Blazers, otro clásico de lo rancio.
La canción se compuso después del manga, un romance de 2.000 páginas de Kazuo Kamimura centrado en dos jóvenes amantes que se abre con su título elevándose sobre Tokio en una llamativa splash page. El sol despunta por la mañana, trina un pájaro, un árbol se eleva hacia el cielo. Los amantes, Kyoko y Jiro, despiertan y empiezan a bromear durante el desayuno. La protagonista sale a la calle a pasear y recuerda el momento en el que decidieron mudarse juntos hace un año. Dos jóvenes que esperaban instalarse en Tokio y concertaron una cita en Shinjuku. Cuando un borracho vomitó en sus botas, se detuvieron para limpiarlas. Justo en ese momento él la propuso irse a vivir juntos. Sin embargo, mientras está recordando la escena se topa con unos policías (se ha producido algún incidente). Dos amantes se han ahogado. Agitada, echa a correr para buscar a Jiro. Al llegar, ella empieza a bromear apuntándole con un cuchillo: "¡Moriremos juntos!" Él la consuela con sexo. Mucho sexo. Cuando cae la noche, fuman y tocan la guitarra. La vida del enamorado. Dousei Jidai.

Por cierto, más o menos el título significa: "La Época de la Vida en Pecado". O quizás: "La Época de la Cohabitación", o puede que: "Días de Convivencia". En lugar de un anillo, todo lo que necesitan es amor. Ciertamente no necesitan decirle nada al casero, mucho menos a sus padres. El sexo, dibujar y descansar bastan para satisfacerlos. En esos tiempos todo esto era demasiado escandaloso. La energía del argumento proviene de su creciente fricción con el mundo que les rodea.

Si de alguna forma este resumen de la historia recuerda Red-Colored Elegy, la obra maestra previa de Seiichi Hayashi, no es ninguna coincidencia. El capítulo final de este manga apareció en la edición de enero de 1971 de Garo. La canción de Morio Agata del mismo título se convirtió en un gran éxito en 1972, y la historia de Sachiko e Ichiro se convirtió en una sensación de gran alcance. El "Boom Dousei" estaba en el aire. Casi se puede escuchar al editor presionando a Kamimura para que hiciese una copia.
Dousei Jidai apareció por primera vez en el semanario Manga Action en marzo de 1972. Pero no es ninguna copia. Mientras que Red-Colored Elegy va fragmentado la historia, Dousei Jidai la expande casi nueve veces la longitud de la primera. Los personajes, todos artistas de algún tipo, viven en viviendas igualmente míseras. Kamimura incluso inclina su cabeza ante Hayashi: el nombre de Ichiro [protagonista de Red-Colored Elegy] significa "primer hijo", por lo que el nombre masculino del protagonista de Dousei es Jiro, "siguiente hijo". Ambos son petulantes y malcriados, pero, al menos parcialmente, Jiro se redime al final de la historia. Y Kyoko, la chica moderna que intenta conseguir que se le respete en su trabajo de la misma forma que a los hombres, se destaca como el personaje más memorable de todos. A su lado, Sachiko parece una simplona.

Además, Kamimura es un dibujante completamente diferente de Hayashi. Ambos eran conocidos como ilustradores, ambos fueron influenciados por el artista de la Era Taishō Yumeji Takehisa. Pero mientras que Hayashi se basaba sobre todo en la forma de componer de Yumeji, Kamimura aprendió de sus claros dibujos de la figura femenina. Además, al igual que muchos de sus compañeros en Garo, Hayashi solo ha producido unos cuantos cómics a lo largo de su carrera. Desde Red-Colored Elegy sólo ha aparecido otro trabajo de importancia, pH 4,5 The Guppy Doesn´t Die. Mientras tanto, la producción de Kamimura incluye Shinano River, Lady Snowblood y Hotaruko, entre otros. A menudo suele colaborar con guionistas como Kazuo Koike, pero también escribe sus propios guiones. En su apogeo dibujaba cerca de 400 páginas cada mes. Aunque tenía asistentes como Jiro Taniguchi (El Caminante), sigue siendo una cifra impresionante. Las 2.000 páginas de Dousei Jidai aparecieron en apenas 21 meses. A propósito, a Kamimura le gustaba el whisky. Su escueta obra lo demuestra.

(Continuará)

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